Los trabajadores de Prosegur iniciaron la huelga el viernes pasado, luego de rechazar la última oferta de su empleador. En ella, no se incluía el reajuste salarial, ni los bonos que exige el sindicato. Además, no se incorporaba ninguno de los temas de seguridad que aquejan a los vigilantes privados del transporte de valores.
En este primer día de huelga, el presidente del sindicato, Hugo Muñoz, señaló “no hemos tenido ninguna comunicación con la empresa. Eso sí, hemos tenido harto apoyo de diferentes agrupaciones sindicales y la prensa ha estado cubriendo nuestra paralización”.
La huelga de los trabajadores de Prosegur puede afectar más allá de los límites de su propia empresa. Y es que el servicio prestado por la empresa incluye cargas de cajeros automáticos, retiro de los dineros de las instituciones bancarias, del retail y de algunos servicios, como las carnicerías y los supermercados.
Ante esto, Muñoz, reconoció el impacto y sostuvo “Nosotros pedimos disculpas, sabemos que (la huelga) genera problemas. Pero pedimos que nos entiendan. Independiente que tengamos estas funciones, somos todos trabajadores, padres de familia y ahora estamos peleando por nuestros justos derechos”.
Entre estos derechos, ellos destacaron mayor protección. “Pedimos mejoras en los chalecos antibalas, tanto para los conductores, como para la tripulación que baja de las unidades blindadas. Mejor infraestructura de los camiones, por fuera se ven pintaditos, con el blindaje que corresponde, pero no tenemos la certeza de que eso sea así. Además, en el interior son un desastre”, alertó el dirigente.
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