El consejero constitucional electo Aldo Sanhueza (exPartido Republicano) anunció este viernes que renunció a su escaño en el futuro órgano que redactará la nueva Carta Magna para Chile desde el próximo 7 de junio, semanas después de conocerse una acusación de abuso sexual en su contra.
«El día de hoy, luego de pensarlo mucho, he tomado la decisión de no asumir el cargo de consejero constitucional», dijo el ingeniero de profesión a través de un comunicado.
Sanhueza fue uno de los tres postulantes de la formación fundada por José Antonio Kast –partido al que dimitió el 10 de mayo– que resultó elegido en los comicios constituyentes del 7 de mayo con el 12,29% de los votos en la Región del Biobío, sacando la segunda mayoría allí.
Este viernes ingresó un escrito al Tribunal Calificador de Elecciones (Tricel) para no asumir su puesto en el Consejo Constitucional, compuesto por 51 ciudadanos.
Las reglas del proceso constituyente -contenidas en la Constitución vigente- establecen que tras su renuncia no habrá un reemplazo en el nuevo órgano, que quedará finalmente con 50 miembros.
En su declaración escrita, Sanhueza afirmó que la renuncia «no ha sido una decisión fácil, pero he llegado al convencimiento de que mi renuncia es un paso indispensable para que el proceso constitucional siga el curso esperado con la posibilidad de lograr un gran acuerdo, y no me gustaría que sectores radicales me utilicen con el fin de impedirlo».
Acto seguido, agradeció «la confianza de las más de 100 mil personas que me eligieron y a quienes me habría gustado representar defendiendo las ideas de la libertad y el progreso de Chile».
Además, acusó que la denuncia en su contra fue utilizada por los adversarios políticos del Partido Republicano: «Lamentablemente, producto de su derrota electoral, la izquierda radical ha decidido utilizarme como una excusa para deslegitimar el proceso, y no se detendrá hasta obstaculizar su desarrollo, buscando funarme y cancelándome desde el primer día de sesiones».
Y reiteró que las acusaciones en su contra son «infundadas» y sólo buscan «utilizarme para entorpecer el proceso».
«La decisión la tomó pensando en mi país y los millones de chilenos que confiaron y que tienen la esperanza de poner fin a este proceso constitucional y así empezar a trabajar con más fuerza para superar la grave crisis económica, social y de inseguridad que estamos viviendo», concluyó.
La situación judicial de Sanhueza fue publicado días antes de la elección del Consejo Constitucional por la cuenta @BotCheckerCL, dedicado al chequeo de la veracidad de noticias e investigaciones propias, que evidenció que el republicano había sido detenido en marzo de 2019 por tocaciones a una mujer en un bus.
Según los antecedentes relatados por medios como Emol y Biobío, una mujer acusó que, a la altura del enlace Penco de la ruta 150, fue tocada en la vagina, por encima de la ropa, por Sanhueza.
Tras la denuncia, el republicano fue detenido por Carabineros y, días más tarde, el Juzgado de Garantía de Concepción acogió la solicitud de Fiscalía de suspensión condicional del procedimiento por un año en la causa, donde estaba imputado como autor del delito consumado de «graves ofensas al pudor».
Además se decretaron las condiciones de no acercarse, ni contactar a la víctima y fijar domicilio.
Transcurrido un año de la audiencia, sin incumplimiento por parte del acusado, la causa fue cerrada y éste sobreseído.
Posterior a la revelación del caso, Sanhueza publicó una declaración donde aseguró «no conocer a la víctima» y aceptaba los cargos con «el objeto de superar el incidente y dar vuelta la página».