Hoy a 50 años del golpe cívico militar, sindicatos y organizaciones del mundo del trabajo a lo largo del país están realizando distintos homenajes a trabajadores y trabajadoras que fueron perseguidos, torturados y desaparecidos durante la dictadura.
Esta semana, la Asociación Nacional de Funcionarios de la Junta Nacional de Jardines Infantiles (Ajunji) rindió un homenaje a Carolina Wiff, trabajadora social, exonerada de Junji, que tenía 34 años cuando ocho agentes de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA) la detuvieron y la hicieron desaparecer en junio de 1975, junto a Carlos Lorca, miembro del Comité Central del Partido Socialista.
En tanto, en el marco de la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado, la Dirección Regional del Trabajo de La Araucanía homenajeó al obrero agrícola José Díaz Toro, dirigente sindical de la estación experimental agraria Carillanca, detenido desaparecido en octubre de 1973.
En miles de casos, la demanda por conocer la verdad y sancionar a los responsables sigue pendiente en Chile.