El ministro de Energía, Diego Pardow, admitió que en Chile falta regulación sobre el soterramiento de las redes eléctricas, la eliminación del cableado «basura» y el manejo del arbolado urbano, pero enfatizó que esas fallas estructurales no pueden ser «excusas» que eximan a las empresas de sus responsabilidad por los interminables cortes de energía que afectan a cientos de miles de hogares desde la noche del jueves.
La crisis fue provocada por el último sistema frontal, que trajo intensas lluvias y también históricas rachas de viento que botaron miles de árboles en la zona centro sur, afectando mayormente a la Región Metropolitana, donde pasadas las 08:00 de la mañana de este lunes aún había 219 mil clientes sin suministro.
En entrevista con El Diario de Cooperativa, planteó que «debemos tener el debate respecto de todos los aspectos donde debemos mejorar, para preparar de mejor manera nuestra infraestructura frente a fenómenos climáticos de mayor intensidad, que se hacen cada vez más frecuentes«.
Sin embargo, «eso no puede ser un obstáculo respecto de la responsabilidad por lo que está ocurriendo hoy», enfatizó.
Recriminó que «ha habido deficiencias y compromisos que sucesivamente no se han ido cumpliendo durante el fin de semana» por parte de las empresas, y «también han sido muy deficientes (en la entrega de información) a los liderazgos territoriales de los alcaldes y sus equipos de emergencia».
«Eso ha hecho que, a la reposición del servicio, que ya ha tomado mucho más tiempo del necesario, se le agreguen factores de ansiedad de las familias, que no corresponde ponerlos en esa situación, y les dificulta la posibilidad de organizar su vida con información clara y transparente», lamentó.
Pardow puntualizó que, «respecto al tiempo de respuesta en la reposición del servicio, los estándares obligatorios para las empresas de distribución no se han cumplido», lo cual «significa que ya estamos trabajando en la formulación de cargos para sanciones y compensaciones».
Asimismo, cuestionó que «la respuesta que hemos tenido, especialmente en temas de información, ha sido muy deficiente, sobre todo en la Región Metropolitana», principalmente de parte de Enel, por lo que -recordó- «desde hoy un equipo de la Superintendencia de Electricidad y Combustibles va a estar haciendo una auditoría in situ en la empresa, para asegurar que los flujos de información mejoren».
Dijo coincidir con el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, que ayer tachó de «vergonzosa» la actuación de la mencionada eléctrica en este evento, «porque no ha cumplido con los compromisos que ha adquirido formalmente en materia de reposición» ni en cuanto a la entrega de información a los usuarios.
Una de los fenómenos que caracterizó el último sistema frontal fue a caída de miles de árboles sobre el tendido eléctrico. Al respecto, el ministro Pardow explicó que «aquellos árboles que están debajo del tendido eléctrico, la poda corresponde a las propias empresas«; aunque igualmente «en este caso hay situaciones donde árboles más grandes, que están más lejos del tendido, producto del viento terminan impactando en éste», y estos eran responsabilidad de los municipios.
Por eso, apuntó que «tenemos que trabajar en un mejor diagnóstico de cuáles están más frágiles y que habrá que reponer en un lugar distinto», Para ello, sin embargo, la legislación que hoy existe «es insuficiente» y «la ley sobre arbolado urbano lleva mucho tiempo en el Congreso».
Otro aspecto a debatir es la necesidad de convertir las redes eléctricas áreas en subterráneas. «Hay pilotos de soterramiento en la zona centro sur», aseguró el titular de Energía: «En zonas rurales el costo es relativamente más parecido a las redes aéreas, pero es más caro en zonas urbas. Pero es una discusión que debemos tener».
Igualmente es relevante la regulación de la «basura aérea», referida a los cables que ya están en desuso, pero permanecen en el tendido. Aquello «vuelve más frágil a los postes, porque aumenta el peso, y también significa una fragilidad adicional respecto de la red. Y hay que reforzar la fiscalización».
Todo ello ha sido factor para las consecuencias ya conocidas. Pero «las causas estructurales no pueden ser una excusa para lo que ocurrió a partir del jueves», subrayó Pardow.
Mientras la emergencia sigue sin ser superada, el Gobierno confirmó que ya está iniciando las acciones correspondientes para formular cargos contra las eléctricas responsables del suministro en las zonas afectadas.
Aunque es un proceso que puede demorar, considerando que recién este lunes 5 de agosto «estamos notificando las sanciones por el evento que ocurrió a principios de mayo, cuando fue mucho menor que hoy, y esa sanción es del orden de los 4 mil millones de pesos, en particular para Enel», informó el secretario de Estado.
Producto del sistema frontal de los primeros días de mayo, se estima que hasta 300 mil clientes sufrieron cortes de luz en el peak del evento, y 500 de ellos llegaron a estar más de 60 horas sin el servicio básico.
En comparación, alrededor de las 08:30 de este lunes aún había 390 mil clientes sin suministro eléctricos a nivel nacional, 219 mil de ellos en la Región Metropolitana (Quilicura, Recoleta, Maipú y Pudahuel, las comunas más afectadas, con entre 19 mil y 13 mil hogares sin energía), todos quienes ya superaban las 80 horas a oscuras. En ese marco, «es esperable una sanción mucho mayor», dijo Pardow.
El peak alcanzó los 1,2 millones de usuarios en todo el país, 750 mil en la capital.
Otro aspecto a tomar en cuenta son las compensaciones.
El titular de Energía explicó que «en zonas urbanas el máximo de tiempo que puede estar sin suministro un cliente son nueve horas al año: atendido que éste ya es el tercer de evento, esas nueve horas ya terminaron hace mucho tiempo, y eso significa que a partir de la hora 10 debe haber compensaciones que se tienen que traducir en descuentos en las cuentas de las personas por la energía no suministrada».
«A ello se agregan compensaciones por los defectos, por los artefactos y las pérdidas que sufren las personas producto del corte«, recalcó.
También hay que sumar las acciones legales que promoverá el Servicio Nacional del Consumidor, que buscarán «reparar de manera integral a los usuarios», sentenció Pardow.
En la víspera, el gerente general de Enel Distribución, Víctor Tavera, adelantó que «el suministro de media tensión», que durante esa jornada alcanzaba unos 270 mil clientes, «se va a poder recuperar entre el día martes y el día miércoles: una visión optimista es el martes en la noche, y una visión que probablemente es un poco más conservadora debería ser el miércoles».
«La baja tensión la estamos abordando desde el día de hoy (domingo). Esto puede tomar unos días más y es un número más reducido de clientes», añadió.
Con todo, admitió que «el trabajo de la información es complejo, queremos entregar la información más precisa posible, y a veces eso toma un poco más de tiempo; entregamos la información ayer muy tarde, no en los plazos que efectivamente el ministro nos había solicitado, (y) lamentamos evidentemente esa situación«.
Hasta la última jornada se reportaban 18 establecimientos de atención primaria de salud en el país que estaban operando con generadores de respaldo, y 21 terminales de buses afectados, 10 de ellos correspondientes a electromovilidad, es decir, destinados a la recarga de las máquinas del sistema Red. Además de ello, 400 semáforos seguían sin funcionar en Santiago.
Fuente: Bío Bío