La Confederación Coordinadora de Sindicatos del Comercio adhirió a las justas demandas de los trabajadores portuarios, y por sobretodo a la lucha que dio el sindicato de estibadores de Valparaiso, quienes superaron los más de 30 días de huelga, siendo invisibilizados por los medios, acusados de intransigentes y violentos por la empresa y la autoridad central.
Queremos expresar a la ciudadanía con voz fuerte y clara, ¡la violencia no viene de los trabajadores! La violencia es propia de un empresariado y un gobierno egoista que se negó sistemáticamente a negociar con sus trabajadores. Violencia es arrastrar innecesariamente a una huelga por más de un mes, negando cualquier acuerdo, sin siquiera asistir a mesas de diálogo, dejando familias enteras sin sustento, solo por codicia y soberbia de una empresa que nada sabe de justicia y responsabilidad social.
Finalmente, la huelga terminó con un acuerdo que contempla $ 1.150.000 para cada trabajor, en cursos de capacitación en seguridad y oficios, proporcionados por el gobierno a través del Sence. Serían 400 portuarios beneficiados, por lo que el costo es de $460 millones.
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