Comisión de Trabajo del Senado despachó el proyecto de Sala Cuna Universal y seguirá su trámite legislativo en la Comisión de Educación del Senado. Sandra López, dirigente gremial de la Región Metropolitana de Aprojunji y encargada comunicacional del EVEP Educación Inicial señala que el proyecto “es un retroceso en derecho”.
Como un “gran avance” calificó el ministro del Trabajo y Previsión Social, Nicolás Mönckeberg, que la Comisión de Trabajo del Senado haya aprobado el proyecto de Ley Sala Cuna Universal, tras la sesión realizada la semana pasada en Valparaíso. El proyecto extiende el beneficio a las trabajadoras, sin distinguir entre dependientes e independientes, o el número de mujeres de una empresa.
El beneficio contempla una cotización adicional de un 0,1%, que será de cargo del empleador, que en el caso de una trabajadora que tenga un sueldo de $400 mil, la empresa tendrá que pagar todos los meses $400 pesos adicionales y garantizará una sala cuna de $245 mil para hijos menores de dos años.
Según el ministerio del Trabajo esto permitirá que cerca de 230 mil mujeres puedan ingresar al mercado laboral y elevar la participación laboral femenina. Sin embargo desde la Asociación de Administrativos Auxiliares, Técnicos y Profesionales de la Junta Nacional de Jardines Infantiles Aprojuni y EVEP tienen una visión distinta y crítica frente al proyecto.
“Este no es un proyecto de sala cuna universal”, dice Sandra López, dirigente gremial de la Región Metropolitana de Aprojunji y encargada comunicacional de Espacio Vinculante por una Nueva Educación Pública EVEP Educación Inicial. “No incorpora a todos los niños y niñas, solamente está pensando para la madre trabajadora pero con condicionantes. La mujer para poder tener acceso a este beneficio tiene que cumplir con una cierta cantidad de horas de trabajo, allí es donde señalamos que existe una discriminación no solo para la mujer sino también para el niño o la niña de madre trabajadora”, señala la dirigenta.
“En la discusión que se dio en la comisión de trabajo se dejó que las mujeres que trabajan menos de 30 horas semanales no van a obtener el beneficio ahí se deja un número considerable de mujeres quienes van a quedar fuera del beneficio. Son principalmente a las mujeres que tienen más precariedad laboral, que trabajan de forma informal, temporeras, que trabajan en turno” agrega Sandra.
Aprojuni y EVEP vienen trabajando hace más de un año en este proyecto junto a la Anef. Uno de los principales motivos de las organizaciones para estar en contra de este proyecto es que consideran que se pierde el derecho de sala cuna, “este vela por los derechos de la mujer, por la protección de la maternidad, por los derechos del niño e incluye tratados internacionales que están ratificados por nuestro país. Si queremos apuntar a la universalidad por qué no seguir aumentando cobertura por la vía que se había estado haciendo en los últimos 10 años en donde dimos un salto de una cobertura de 15% en sala cuna a un 45%. Vemos que es un retroceso en derecho, un retroceso en los niños y las niñas”, comenta Sandra.
Sandra destaca también que el costo del beneficio va a ser de los trabajadores también, no solo del empleador y se va a utilizar el seguro de cesantía. Otro punto de discrepancia con el gobierno es que con este proyecto ingresarían más mujeres al mundo laboral. “El proyecto habla de un número considerable de mujeres que ingresarían al mundo laboral, más de 200 mil mujeres. Si tu sacaras la oferta tanto pública como privada, que no cumplen con los mínimos de calidad no alcanzaría la oferta. Tampoco existe la oferta de profesionales, de técnicos de educación parvularia”, comenta Sandra.
De acuerdo a la dirigenta solo un 6% de salas cunas particulares cuentan con la certificación para poder dar una educación de calidad y cerca de un 2% de jardines infantiles VTF cumplen con un reconocimiento oficial.
“Se habla que este beneficio se va a entregar a todos los niños y niñas, no solo a los más vulnerables y ya las instituciones públicas estamos sobrepasadas con el número de niños a atender eso significa que la oferta pública que se va a poder entregar para este beneficio va a ser mínima, todo va a ir por el lado de salas cunas particulares, ” concluye la dirigenta.
Desde Aprojunji llaman a todo el mundo sindical y a parlamentarios a involucrarse y defender derecho adquirido de sala cuna de artículo 203 de código del trabajo, “el cual está siendo derogado en parlamento con proyecto de gobierno conocido como sala cuna universal”.