Trabajador de la salud gravemente herido por Carabineros: «El Estado solo busca callarnos a base de represión»

Este viernes se realizó una nueva y masiva manifestación en Plaza Dignidad (Ex Plaza Italia) en rechazo a la represión sufrida por Gustavo Gatica y Fabiola Campillay que en ambos casos derivó en la pérdida de sus dos ojos.

La movilización además tenía por objetivo rechazar la represión generalizada y la violación sistemática por parte del Estado a los derechos humanos.

Sin embargo, nuevamente, las fuerzas especiales de la policía arremetieron contra los manifestantes. Uno de los casos de gravedad fueron las lesiones ocasionadas por el carro lanza aguas contra un trabajador del Hospital Barros Luco Trudeau quien señaló para La Izquierda Diario que:

«Yo estoy movilizado porque es mi forma de contribuir a buscar la manera de ponerle fin a las injusticias y de vivir con las miserias que se vive actualmente en nuestro país, porque está demostrado que si hay una forma de conseguir algo es luchando y quiero invitar a todos a seguir luchando, a no dejarse amedrentar por el Estado que solo busca callarnos a base de represión y más represión y por ende no debemos ceder o estaremos condenados a vivir siempre de esta forma: reprimidos, endeudados, enfermos y sin estudios que es todo lo que se dedican a quitarnos, lo esencial para el crecimiento de un pueblo.»

Raúl Muñoz, dirigente de la FENATS Barros Luco denunció: «el gobierno a través de la represión quiere amedrentar tal como lo constató el informe de amnistía internacional y de Human Rights Watch. Denunciamos esta situación y anunciamos que continuaremos como organización de trabajadores denunciando cada caso de violación a los derechos humanos provocado por este gobierno. Ahora amenazan con poner a los militares en lugares estratégicos apuntando directamente a los hospitales, reprimen a las brigadas de pprimeros auxilios y a quienes se manifiestan. No callaremos, somos parte de todo un Chile que le perdió el miedo a quienes hoy buscan a toda costa proteger sus privilegios: los empresarios y los políticos de los partidos del régimen».