«Hemos conversado y llegado a ciertos puntos de acuerdo”. Con esa frase la diputada de Amplitud, Karla Rubilar, resumió la cita que ella junto al diputado Pedro Brown, sostuvieron con sus pares de la Democracia Cristiana, Matías Walker, René Saffirio y Patricio Vallespín para analizar la propuesta de reforma laboral que el pasado 29 de diciembre envió el Gobierno al Parlamento.
Tras la reunión que tuvo lugar en una de las cafeterías del Congreso, la legisladora de oposición señaló que “compartimos la necesidad de avanzar en titularidad sindical y efectivamente que se le de mayor poder a los sindicatos para que puedan negociar colectivamente y tengan más poder de conseguir beneficios para los trabajadores”.
No obstante, precisó, que a juicio de su referente “tiene que haber diferencias entre lo que son las grandes y las pequeñas empresas y ese es un punto en común que tiene Amplitud con la Democracia Cristiana, que vamos a defender fuertemente en que la reforma laboral frente a estas materias sindicales no afecte a las pequeñas y medianas empresas”.
A su turno, el diputado Saffirio valoró el resultado del encuentro enfatizando que “este es el inicio de un proceso de conversación y de diálogo respecto de leyes que fueron ingresadas a la Cámara, como aquellas que esperamos ingresen en el futuro y, particularmente como muy bien lo ha señalado la diputada Rubilar, en aquellos temas vinculados con los trabajadores del sector público”.
Ello en referencia a que el Estado tiene una deuda pendiente que pagar, particularmente con los trabajadores a contrata y a honorarios y “habrá que buscar la forma de revertir los porcentajes de planta, a contrata y a honorarios, de tal manera que el sistema público no sea quien también viole y transgreda la ley como está ocurriendo hoy día”.
En tanto, Vallespín dijo que “nos parece sumamente positivo que Amplitud vea que esta agenda laboral es buena para Chile, que quiera sumarse, que quiera ayudar a perfeccionarla nos parece que es la tarea que debe hacer un partido (movimiento) que debe mirar de manera distinta los temas que el Gobierno quiere poner sobre la mesa y que no parte con un ideologismo obcecado y cerrado como la UDI que por definición se opone a todo aquello que signifique modificaciones en el sistema actual”.
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