El presidente nacional de la Federación Nacional de Trabajadores de Empresas de Aseo, Jardines y Rellenos Sanitarios, Armando Soto, nos comentó sobre la situación actual de los 34 mil trabajadores representados por FENASINAJ. De paso, se refiere a la carrera “Hombres de Hierro”, prevista para el 22 de noviembre. Se trata de un trayecto de 7 kilómetros por la comuna de Santiago y ya tiene 100 inscritos.
POR: Felipe Menares Velásquez/ Sindical.cl
[05 de octubre de 2015] Armando Soto destaca que han mejorado las condiciones laborales, a partir de la movilización de 2013. Sin embargo, considera que persisten algunas dificultades asociadas a la falta de una categoría contractual específica, puesto que los conductores de los camiones se encuentran aparejados con los transportistas de carga y, a su vez, los auxiliares se rigen igual que los peonetas de camiones.
¿Cómo describirías la situación actual de los trabajadores de aseo y ornato en Chile?
Tenemos mucho que hacer, todavía. Hemos ido mejorando algunas condiciones salariales, de higiene y seguridad, a través de las bases y licitaciones, pero hay una deuda muy grande con un porcentaje importante de trabajadores, que se desempeña en forma precaria y en condiciones muy inhumanas.
La perspectiva que tiene FENASINAJ es que todos los recolectores de basura deberían tener el mismo trato y ganar lo mismo, porque cuando se privatizaron estos servicios de utilidad pública, no se hizo un marco que regule las normas y fórmulas de traspaso.
Cuando éramos municipales, teníamos jornada, horarios y turnos. Había gente que se preocupaba de nuestra salud, nos vacunaban dos veces al año. Cuando esto se traspasó al sector privado, todo eso quedó de lado y las empresas querían, naturalmente, ganar plata. Desgraciadamente, los primeros 15 años lo hicieron a costillas del esfuerzo del trabajador, con jornadas de hasta 16 horas diarias y sin un mejoramiento en las remuneraciones.
En el paro de 2013, denunciamos al Estado de Chile, por entregarnos a un sector desregulado y que permitió el abuso durante tantos años. Entonces, tenemos como perspectiva, mejorar lo que se está haciendo. Hay cinco municipios que ya incorporaron salarios decentes, condiciones dignas y jornadas adecuadas. Esperamos que todo esto regularizado, en un plazo de tres años.
¿Cuáles son las luchas puntuales que están dando en estos momentos?
Hoy se está trabajando en un proyecto de ley que venga a regular el sector, de forma definitiva. La gran meta es crear una identidad propia para los recolectores de basura. Por ejemplo, los conductores están insertos dentro de la categoría de conductores de transporte de carga. Nuestros auxiliares figuran como peonetas de carga, pero de camiones de transporte. Entonces, nos genera un gran problema, porque la labor que hace el recolector de basura es muy distinta a la de un transportista de carga.
Nosotros queremos crear nuestra propia identidad y, a través de ello, mejorar la protección que deberíamos tener los trabajadores, porque pertenecemos a un sector de alto riesgo, que no ve reconocidas sus enfermedades profesionales. Un viejo que corre 20 años, y cargando entre 25 a 30 toneladas diarias, terminará indudablemente con su columna vertebral destrozada. Cuando un trabajador va con lumbago crónico a las mutuales de seguridad, los rechazan, aduciendo que esa es una enfermedad común.
Esperamos que el proyecto de ley siga adelante, a pesar que no nos ha ido muy bien con la ministra Rincón. Hace dos meses, tuvimos una entrevista con ella y se comprometió a instalar una mesa técnica en 15 días, cuestión que no se ha hecho.
Recolectores de Hierro
FENASINAJ está organizando una corrida para el 22 de noviembre. La convocatoria busca crear conciencia acerca del esfuerzo realizado por los recolectores de basura, quienes, para realizar su trabajo, corren grandes distancias diariamente.
¿Por qué la corrida se llama “Hombres de Hierro”?
Fue una idea de Mauricio Cerda (productor del evento). Está basado en la labor que nosotros cumplimos. Es decir, trabajar 12 o 14 horas corriendo detrás de un camión no lo hace un ser humano normal. Tiene que ser un hombre súper poderoso. En este caso, son los recolectores, considerando que diariamente recorren entre 20 y 25 kilómetros y los 10 primeros, trotando. Si a eso le sumamos que tienen que cargar entre 2500 y 3000 kilos diarios, nos da un motivo para decir que realmente estos viejos son hombres de hierro.
Hicimos entrevistas con los trabajadores a nivel nacional y vimos que había gran interés por la participación en esta corrida que, de alguna manera, nos servirá para mostrar la otra parte de los recolectores de basura y cambiar la imagen de los mismos.
¿Cómo es esa imagen que existe sobre los recolectores de basura?
Creo que ha venido cambiando, favorablemente. La imagen que se tenía antes era que las personas que llegaban a este sector no tenían opción de trabajo en ningún otro lado. Hemos ido revirtiendo esa imagen, con la sensibilidad que hemos ido creando y dándole a entender a la gente la importancia de la labor que hacemos.
Antes éramos todos viejitos, supuestamente, y que no teníamos alternativas. Hoy tenemos a muchos jóvenes, debido al mismo cambio que se le ha ido dando a la visión de un recolector de basura.
Trabajar en la basura es una labor muy importante para el día a día de la ciudad. Eso lo demostró el movimiento que se hizo en 2013, cuando los recolectores de basura decidimos tomar la decisión de paralizar el servicio, para que todo el mundo supiera sobre las precariedades que estamos viviendo. De ahí surgió un cambio absoluto, porque acusamos al Estado de Chile de tener un sector tan importante, para el funcionamiento de la ciudad, tan abandonado y maltratado.
¿Hoy se sienten reconocidos por la sociedad?
Eso lo hemos ido cambiando poco a poco. Creemos que la idea de la corrida llegó en un momento justo. Este cambio de mentalidad en la gente está muy asociada con lo que pasa con los recolectores. Siempre decía que al recolector de basura todo el mundo lo veía, pero nadie lo miraba. Uno veía un hombre corriendo detrás de un camión, pero jamás le vio la cara ni supo como era.
Eso lo podemos graficar con lo siguiente: en una oportunidad, después del trabajo, nosotros pasamos por las casas de los vecinos y saludamos. Ellos nos respondían preguntando quiénes éramos y les decíamos que éramos aquellos que han pasado dos o tres años sacándole la basura. O sea, esa percepción la hemos ido cambiando.
Sensibilidad. Reconocimiento. Dignidad. En el fondo, creo que la forma como se está tratando “Hombres de Hierro” apunta para ese lado, para que la gente vea la otra cara del recolector.
¿Cuáles son tus expectativas respecto de la corrida?
Creemos que el evento nos ayudará mucho para la lucha que estamos dando dirigentes nacionales. Acabamos de llegar de una gira que hicimos por Antofagasta, San Felipe, Osorno y Valdivia y esto nos sirve para que la gente entienda que hay un organismo detrás que, a pesar de los años que tiene, no habíamos tenido oportunidad de mostrarnos a la ciudadanía.
¿Quiénes están convocados?
Todos los recolectores del país, a través de sus sindicatos y organizaciones y la idea es que participen todos, por eso se están generando algunas categorías (por edades, capacidades diferentes, sillas de rueda, recolectores).
¿Quién los apoya en la realización de esta carrera?
Vamos a pedir a los municipios, que tienen trabajadores en sus comunas, un apoyo para los traslados. Si se niegan, el sindicato tendrá que apoyar a los corredores, sino, FENASINAJ tendrá algo que decir.
Denos su opinión