Luego de que el tribunal electoral de la Región Metropolitana rechazara la reclamación que hizo el partido para intentar «salvar» a sus candidatos, dos dirigentes de la colectividad intentaron renunciar a sus cargos al asumir la responsabilidad, aunque fueron contenidos. Por ahora, están a la espera del resultado de la apelación ante el Tricel.
Septiembre se ha convertido en un verdadero dolor de cabeza para el partido Amarillos por Chile. Los integrantes de su directiva han permanecido convulsionados desde que el martes de esta semana el segundo tribunal electoral de la Región Metropolitana les informó que se rechazó la reclamación presentada por ellos que intentaba permitir a sus candidatos a concejales competir como independientes, luego de que estos fueran impugnados.
En el documento emitido por el tribunal electoral se constata que las candidaturas fueron rechazadas debido a que el partido intentó presentar candidaturas independientes, pese a no estar constituido en la Región Metropolitana. En ese sentido, desde el organismo electoral explicaron que “los pactos y los subpactos que lo componen solo podrán incluir candidatos de los partidos políticos que se encuentren legalmente constituidos en la región”.
A través de la reclamación, el presidente de Amarillos, Andrés Jouannet, reconoció que hubo un error al subir los candidatos en el sitio web del Servicio Electoral (Servel). “Lo que ocurrió (es que) la plataforma automatizó la inscripción de los candidatos independientes habilitados por Amarillos como candidatos de mi partido, cuando lo correcto debió ser que fueran declarados como candidatos independientes dentro del pacto, y en caso de que debieran contar con patrocinio de un partido, debía provenir del otro partido del pacto (Demócratas)”, se lee en el documento.
De todas formas, el diputado reclamó que “aun cuando existió un error, este no debe acarrear la exclusión de las candidaturas aceptadas, sino rectificar ese error en el patrocinio y mantener los candidatos en condición de aceptados, ya no como parte del partido Amarillos, sino como independientes dentro del pacto Centro Democrático”. En ese sentido, en el partido están a la espera de los resultados de la apelación ante el Tribunal Calificador de Elecciones (Tricel) y mantienen la esperanza de que finalmente se les permita competir a sus candidatos.
En el partido se ha acrecentado la molestia contra el Servel, pues argumentan que inicialmente pudieron inscribir sus candidatos de forma exitosa, y que luego de hacerlo se les notificó sobre el error. Por lo mismo, transmiten desde el partido, el diputado Joaunnet pretende llevar al organismo electoral a la Contraloría junto a otros parlamentarios.
El embrollo con el Servel fue solo una parte de la dura semana que enfrentó el partido. Producto de la resolución emitida por el organismo electoral, el mismo 3 de septiembre la prosecretaria de Amarillos, Bernardita Soto, quien se hizo cargo de la supervisión del proceso de inscripción, presentó su renuncia a la directiva a través de una carta. También decidió dar un paso al costado Jaime Vicencio, quien se desempeñaba como presidente regional metropolitano provisorio del colectivo.
Sin embargo, al día siguiente, la directiva, que encabeza el diputado Jouannet, emitió una declaración que fue enviada a los integrantes del comité político de la colectividad y a la que tuvo acceso La Tercera. En ella reconocieron que fueron notificados de las dos bajas a raíz de la resolución del tribunal electoral regional, pero consideraron que “dichas renuncias son improcedentes, ya que el partido está apelando” ante el Tricel.
Ayer, además, un grupo de militantes del partido hizo circular otra carta. En ella le hacían saber a la prosecretaria Soto que cuenta con su respaldo. “No puede dejar su cargo en un momento tan determinante como el que vivimos. Su salida sería una pérdida irreparable para el equipo y para la campaña electoral en curso”, plantearon. Entre los firmantes, están Sergio Solís, Gonzalo Rojas-May, Matías de la Fuente, Jouannet, Ricardo Brodsky y Zarko Luksic.