Las centrales de trabajadores hicieron un balance negativo frente a las últimas indicaciones a la Reforma Laboral, y aunque están de acuerdo con el llamado a paro de la CUT, esperan organizarse con ellos para evaluar estrategias que permitan llevar a cabo una gran jornada de protesta.
El Gobierno, en conjunto con los parlamentarios, presentó 40 indicaciones a la Reforma, entre las que se abordó la extensión de beneficios, titularidad del sindicato interempresas y reemplazo interno por huelga . A propósito de ello las centrales sindicales analizaron el escenario actual y evaluaron la convocatoria a paro nacional realizada por la CUT.
El vicepresidente de la CUT, Nolberto Díaz aseguró que los políticos están coludidos con los empresarios para afectar a los sindicatos.
Añadió, “para mí cualquier fórmula que garantice el reemplazo interno, es una fórmula que debilita la huelga. Nuestra satisfacción no es plena, porque el Gobierno ha presentado un proyecto laboral que es insuficientes”.
El presidente de la Central Autónoma de Trabajadores (CAT), Oscar Olivos, mencionó que como central ellos esperaban primero un cambio al Código Laboral, que desde la dictadura ha tenido solo variaciones mínimas, y que participen todos los sectores. “Esta Reforma fue solo un cambio de palabras, un maquillaje a lo que ya estaba”, dijo.
Por su parte, el presidente de la Unión Nacional de Trabajadores, Segundo Steilen, indicó que, “el Gobierno a ha arrugado, es costumbre de la clase política hacer las cosas a medias, reformas a medias, y dar soluciones parche a los chilenos”.
Steilen hizo un llamado a la unidad para la movilización convocada para el 22 de marzo. “En el sector privado ya estamos viendo hacer el paro de brazos caídos, y yo me puse a disposición para conversar con esos sectores, pero la compañera presidenta no nos volvió a hablar, necesitamos garantías y unirnos como trabajadores”, sentenció.
Olivos, sostuvo: “creemos que el movimiento sindical debe levantar su voz y hacer la movilización correspondiente, nos habría gustado que los compañeros de la CUT antes de haber llamado a un paro, se hubiesen puesto de acuerdo con nosotros y convocar juntos a un paro, no como un vagón de cola”.
Finalmente, el vicepresidente de la CUT, señaló que esta es una marcha de todos los trabajadores”. Al consultarle las razones de por qué no se reunieron antes con las otras centrales, dijo que “no siempre las cosas se hacen bien, haré los esfuerzos para contactarme con mis compañeros trabajadores”.
La marcha convocada para el 22 de marzo, según aseguraron desde la Central Unitaria de Trabajadores, tiene dos características principales: decir que la Reforma Laboral que se está aprobando cualquiera sea el resultado, no es la Reforma que la CUT plantea y levantar con fuerza el fin a las AFPs.
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