La Central Unitaria de Trabajadores (CUT) junto a dirigentes de empresas de generación y distribución eléctricas de Enel, más la Confederación de Trabajadores de la Energía, culparon al modelo que la empresa italiana sustenta, que llevó al corte de luz y su tardía capacidad de reposición.
Felix Medina, presidente de la Confederación Nacional de Sindicatos de Empresas Eléctricas, abordó la tardanza en la renovación de la totalidad del suministro. Precisó que en CGE y Enel “el 100% del trabajo en terreno es contratista“.
El dirigente indicó que cuando los trabajadores de cuadrillas pertenecían a las empresas, “la compañía se preocupaba de la capacitación, situación que el contratista no se hace cargo, por eso hay una alta rotación y no hay pericia por parte de los funcionarios”.
“Son negligencias reiterativas, ya ocurrió en el norte con los aluviones, con la lluvia en el sur, con el terremoto en Coquimbo, donde todas las empresas han tenido serias dificultades para poder asegurar los servicios en los que están comprometidas, por lo que nosotros como trabajadores del sector, queremos que esto se internalice lo antes posible, contratistas que hoy día están en la calle, y de esa manera también la empresa genere condiciones de personal con conocimiento, con cualidades y capacidades para enfrentar este tipo de trabajo, que por lo demás es bastante riesgoso”, argumentó.
Hace algunos días, el Sindicato de Profesionales de Enel, emitió un comunicado donde dio cuenta de las condiciones de precariedad en la que labora la totalidad de las cuadrillas a cargo del mantenimiento preventivo, con contratos tercerizados.
Ante los cuestionamientos, el gerente general de la trasnacional de capitales italianos, Nicola Cotugno, se defendió este jueves e informó que la compañía ha invertido al menos 360 millones de dólares en los últimos años.
El Presidente del Sindicato número 1 de Enel, Jorge Gómez indicó que la mayoría de esos dineros se han destinado a tecnología, no a trabajadores, ya que lo que se busca con la subcontratación es reducir la mayor cantidad de costos.
“Cuando son suplementarios, cuando son contrataciones extras, hay que ver cuál es la calificación técnica de esas personas, por lo que para mí por ejemplo, no es lo mismo tener un trabajador que está permanentemente ocupado en este tipo de labores a traer a un grupo que hay que poner a funcionar, ahí de inmediato y que ha estado fuera del circuito. Si tú contratas un técnico universitario tienes que pagarle como corresponde a su función, sin embargo se opta por personas de baja calificación sólo con un propósito economicista”, detalló
En tanto la presidenta de la Central Unitaria de Trabajadores, Bárbara Figueroa, aseveró que los servicios básicos como la luz y agua deben volver a ser controlados por el Estado.
La representante de la multisindical, recalcó que este sector no puede ser considerado estratégico en las condiciones que actualmente se desempeña. “Su petición de no tener negociación colectiva efectiva ante la Dirección del Trabajo sólo busca impedir el derecho a huelga de sus trabajadores”.
En tanto, en conversación con Radio y Diario de la Universidad de Chile el diputado Demócrata Cristiano, Gabriel Silver informó que pidió a la Presidenta Michelle Bachelet, junto al parlamentario Claudio Arriagada, poner fin a la concesión de servicios eléctricos de ENEL.
“Caducar la concesión o que por lo menos se estudie por parte de Gobierno esta herramienta que está en la Ley de Servicios Eléctricos, y aquí evidentemente sentimos cierta tibieza por parte de las autoridades, como la soluciones de hoteles para ricos y soluciones, sólo que comprenden manifestaciones, para pobres”, argumentó.
Silver, reafirmó su crítica hacia la reacción de las autoridades competente, en especial hacia el ministro de Energía, Andrés Rebolledo. El parlamentario no descartó la posibilidad de interpelar y acusar constitucionalmente al secretario de Estado, debido a su presunta responsabilidad en la falta de fiscalización y representación de los intereses del Estado frente a las distribuidoras eléctricas.
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