El pasado jueves 20, en el tribunal del Trabajo de San Miguel, se desarrolló el juicio en contra de la Municipalidad de Lo Espejo por la desvinculación del profesor Álvaro Alvear aludiendo a su «salud incompatible para su cargo» como la causal de la decisión tomada arbitrariamente por el alcalde PPD, Miguel Ángel Bruna. En la ocasión se demostró que el docente no tenía los 180 días para ser despedido por la causa mencionada.
Este hecho se enmarca en la serie de despidos que desde fines del año pasado se vienen ejecutando en dicha municipalidad, donde fueron ocho los casos de similares características. Lo que además refleja las condiciones de persecución, hostigamiento y miedo en que se desarrolla el trabajo docente en la comuna.
En esta misma tónica los representantes del magisterio se presentaron este lunes en el Ministerio del Trabajo, encabezados por Mario Aguilar y en compañía del diputado PS, Osvaldo Andrade; quienes entregaron una moción para modificar en el estatuto docente la norma del despido por salud incompatible.
Ante ellos, la ministra del trabajo, Alejandra Krauss, los recibió declarando que “la moción presentada por el diputado Andrade, con el apoyo transversal de las distintas bancadas, y recogiendo los anhelos de los profesores de nuestro país, representados por Mario Aguilar, nos ha parecido una moción y un proyecto de ley que en este país, y particularmente los profesores, lo necesitan“.
En el contexto de la lucha que viene dando el magisterio por terminar con tan nefasta ley, se presentó una significativa audiencia, que repletó la sala con asistentes al juicio entre los que se encontraban profesores, dirigentes comunales y del Regional Metropolitano, como clara muestra de lo transversalidad que es la problemática entre los docentes.
No es menor esta lucha que ya lleva meses de tensiones, pues la misma ley dictaminada desde el municipio pudiese afectar a cualquier trabajador del sector público. Sin embargo, no existen ni las condiciones laborales ni una responsablidad sistemática en la salud de los profesores o de cualquier trabajador, quedando en manos de un alcalde la evalución de compatibilidad de un cargo sin siquiera atender a las repercusiones que tienen las condiciones laborales de los docentes en su salud, como son los trastornos de salud mental y otros derivados del ejercicio de su noble profesión. En un sistema educativo permeado por las lógicas del modelo neoliberal que termina precarizando las condiciones en que los y las maestras desarrollan su trabajo.
Por comisiones de salud en los sindicatos, por una salud que se ejerza como derecho y por condiciones laborales dignas los profesores deben continuar su lucha histórica frente a un modelo que se precariza en calidad y que deteriora la salud de sus docentes e injustamente arrasa con sus derechos sociales mínimos.
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