La empresa con más de 30 años de funcionamiento vendió sus 14 locales, y así se sumó a la cada vez más larga lista de fábricas y empresas que han cerrado dejando a miles de trabajadores y sus familias en la calle.
Ahora es el turno de Central Frenos, empresa de la familia Pérez Mardones, la cual desde el año 2013 era controlada por Emasa, representante de Bosch en Chile, Perú y Bolivia. Según aseguraron fuentes como el Diario Financiero.
Son 140 trabajadores, en conjunto con sus familias, quienes hoy en día quedan en la calle, dejando en peligro su subsistencia. Se suman además, a los más de 5 mil despidos a nivel nacional, en un contexto que ha echado por tierra el discurso demagógico de la derecha y sus “tiempos mejores”.
Enfrentemos los despidos con organización
Durante el día de ayer los sindicatos de trabajadores mineros de Chuquicamata paralizaron, el motivo, los más de 1700 despidos que se vienen ahora producto del comienzo de la nueva faena bajo tierra.
Este hecho contó con la participación de trabajadores del Ferrocarril Antofagasta Bolivia (FCAB), así como de la planta de Explosivos Orica, ambos lugares donde se han organizado contra los despidos, enfrentándolos con organización.
En ese sentido, Nicolas Bustamente, Dirigente del Sindicato Interempresa de FCAB hizo un llamado “al conjunto de los sindicatos, organizaciones sociales y agrupaciones estudiantiles, para levantar una gran coordinadora para enfrentar los despidos, porque hoy en día los tiempos “mejores” de Piñera solo han traído tiempos peores para los trabajadores, ya lo vimos en el sur con los despidos en Iansa, Pastas Suazo, en Maerks, en constructora CIAL y hoy en día los estamos viendo con estos anuncios en Codelco y también en el Ferrocarril. Es por eso que hacemos un llamado a fortalecer y a construir la más amplia unidad y solidaridad para transformar la nueva organización de los trabajadores para poder parar los ataques de los empresarios de una vez por todas”.
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