Los candidatos de Apruebo Dignidad reafirmaron sus diferencias en el trato de pequeñas empresas que no tienen cómo pagar sueldos «dignos».
Sobre eventuales violaciones a DD.HH. durante las protestas en Cuba, el comunista apuntó que «me molesta el doble estándar» frente a hechos similares en Chile.
Boric además tomó distancia de una eventual legalización de drogas sintéticas, como la cocaína y la pasta base, a la que aludió Jadue.
Sus eventuales políticas para ayudar a las pymes del país y las visiones de ambos candidatos frente a las manifestaciones en Cuba marcaron el último debate televisado de los abanderados de la primaria de Apruebo Dignidad, Daniel Jadue (PC) y Gabriel Boric (FA), que se enfrentarán en las urnas el 18 de julio.
Todos los canales de televisión abierta -salvo La Red– transmitieron este último foro, que se vio precedido por días de declaraciones cruzadas entre adherentes de cada uno sobre los destinos de las pymes que, a falta de «sueldos dignos» para sus trabajadores, no podrían continuar, según dio a entender el alcalde de Recoleta.
«Cuando se cometen errores de cuña, mejor decir ‘sabes qué, me equivoqué, no era lo que quería decir'», planteó Boric, a lo que Jadue replicó que «los errores de Ramón López -encargado del aspecto económico de su programa- no los puedo asumir yo».
Sin embargo, preguntó al diputado si «¿Tú crees que una empresa después de tres años de subsidio a la pyme, puede existir si no puede pagar sueldos que le permitan a una familia vivir hasta el día 30?«, a lo que Boric replicó estimando que el énfasis en plena crisis económica debería ser en que «vamos a acompañarlas para que puedan pagar mejores salarios».
Jadue rebatió reiterando: «¿Y si después de tres años no lo pueden hacer, tú qué les dirías?», y entonces el frenteamplista admitió que «hay que cumplir con la ley, sin lugar a dudas (…) El punto es cómo lo planteamos, porque no queremos a las pymes en contra de nuestro gobierno«.
Frente a las protestas registradas en distintas localidades de Cuba este domingo, en las que se habrían registrado agresiones y detenciones arbitrarias de manifestantes, eel diputado por Magallanes solidarizó con el movimiento, y reafirmó que «tengo un sólo estándar en materia de violaciones a los Derechos Humanos: son inaceptables», al tiempo que admitió que «para la izquierda chilena ha sido difícil tener un sólo estándar en la condena» a ese tipo de hechos.
«Creo que el Partido Comunista, tal como lo hizo históricamente respecto a las revoluciones en Hungría, Checoslovaquia y Afganistán, va a terminar tomando una postura distinta con el paso del tiempo», previó.
A su vez, el candidato comunista enfatizó que «no soy partidario de la criminalización de la protesta social en ninguna parte del mundo, como se ha hecho acá en Chile», por lo que ante lo que se acusa que ocurre en Cuba, apuntó que «lo puedo condenar, pero me molesta el doble estándar».
«Las violaciones a los Derechos Humanos se dan todos los días en este país, pero parece que a algunos periodistas les interesa mucho más lo que pasa en Cuba y otras partes, no así en Palestina, ni en Colombia», fustigó el alcalde.
De todas maneras, reconoció que desde que Fidel Castro asumió el poder en Cuba a fines de los 50, «por supuesto que sí» han habido violaciones a los Derechos Humanos en la isla.
Mientras que Boric descartó que Mauricio Hernández Norambuena, ex frentista que bajo el alias de «comandante Ramiro» participó en el asesinato de Jaime Guzmán, pueda ser considerado un preso político, Jadue señaló que «me abriría a la posibilidad de indultarlo», al compararlo con acciones similares que beneficiaron a violadores de DD.HH en Chile.
«Se les dio muchas más posibilidades de inserción cuando llegó la democracia, y no a aquellos que habían asumido la lucha armada como una forma de autodefensa de nuestro país, y por lo tanto, ellos fueron excluidos y no hubo ninguna política ni de reconocimiento, ni de reparación», expuso.
Por quien sí se inclinan a indultar ambos candidatos es al también ex frentista Jorge Mateluna, condenado en 2014 a 16 años de cárcel por el asalto a una sucursal del Banco Santander, y quien mantiene su inocencia desde entonces.
En cuanto a la despenalización de las drogas «escalonada» por la que aboga Jadue, el abanderado estimó que «en una fase posterior» podría legalizar sustancias como la cocaína y la pasta base, lo que constaría de «una entrega regulada para los adictos desde el aparato del Estado».
Su propuesta es «anticipar al consumidor conflictivo, pero además, ocupar la plata que hoy se bota en la guerra contra el narco en prevención, más desarrollo de cultura, de artes, deportes y rehabilitación, que es lo que en este país nunca se ha hecho».
Boric se distanció de aquello, señalando que su idea es que se legalice el autocultivo de la cannabis sativa, y si bien se abriría a hacer lo mismo con otras drogas, considera que «lo más importante es irle quitando terreno al narco».
Fuente: Cooperativa