El impuesto a los fondos de inversión de los superricos de Brasil implementado por el gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva permitió que la recaudación tributaria en enero haya sido la mejor de la historia.
Uno de los factores que contribuyó positivamente al resultado fue la tributación de los fondos de inversión exclusivos de los llamados superricos, que generó 4.100 millones de reales, 830 millones de dólares, un crecimiento real del 24,4%.
El impuesto a los superricos es una idea que ronda desde hace tiempo en el ámbito internacional. En enero de este año, más de 250 multimillonarios y millonarios exigieron pagar a la élite política mundial reunida en el Foro Económico Mundial en Davos más impuestos sobre el patrimonio para ayudar a pagar mejores servicios públicos en todo el mundo.
“Nuestra petición es simple: os pedimos que nos hagáis tributar más a nosotros, a los más ricos de la sociedad”. Si no se toman medidas “para hacer frente al dramático aumento de la desigualdad económica, las consecuencias seguirán siendo catastróficas”, exigieron en una carta abierta a los líderes mundiales.
¿Qué dicen al respecto nuestros magnates chilenos? Cada vez que el gobierno ha mencionado aumentar los impuestos al patrimonio -en inglés wealth tax o impuesto a la riqueza- los gremios empresariales y los partidos de derecha se han lanzado en picada contra tamaña “insensatez”.
Fuente: Interferencia