El ministro Nicolás Monckeberg aseguró que durante los próximos días establecerá conversaciones con los diversos actores involucrados para iniciar la negociación. A su vez, desde la CUT proponen que sea el Consejo Superior Laboral el que determine los parámetros para el futuro.
Días antes de asumir como ministro del Trabajo y Previsión Social, Nicolás Monckeberg se reunió de manera privada e informal, en un café en el centro de Santiago, con la directiva de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT).
En la cita, donde trataron distintas temáticas en relación al mercado laboral, fue la primera vez que se puso sobre la mesa la discusión sobre el reajuste del salario mínimo.
Sin embargo, una vez que Monckeberg ya se instaló en la oficina del ministerio, la CUT hizo su planteamiento formal. “La negociación de reajuste plurianual nosotros se lo planteamos al ministro”, confirmó la presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa, respecto a la reunión que sostuvieron ambas partes, al día siguiente de la instalación del nuevo gobierno.
Esta fórmula de reajuste salarial plurianual ya se había implementado en 2014, cuando la gremial llegó acuerdo con los Ministerios de Hacienda y Trabajo para elevar gradualmente la remuneración mínima por 3 años. Así, en 2015 el salario mínimo llegó a $241 mil, en 2016 fue de $250 mil y en julio de 2017 alcanzó los $270 mil. Sólo el reajuste de enero de este año quedó fuera de la negociación plurianual, lo que volvió a confrontar a la multisindical con el Gobierno, ya que el aumento desde el primer mes de 2018 fue de $6 mil, llegando a los $276 mil actuales.
Las conversaciones sobre la fórmula del reajuste del salario mínimo están más avanzadas. Por lo menos así lo manifestó el ministro Monckeberg, quien sostuvo que “la discusión sobre salario mínimo es una discusión que queremos hacer con altura de miras y con toda la responsabilidad. Creo que le hace bien al país llegar a acuerdos plurianuales, con parámetros objetivos que le dé más certeza al trabajador y a la empresa”.
Condiciones para negociar
Si bien, el monto de reajuste de salario mínimo es el principal factor en las negociaciones, siempre hay otras condiciones que van complementando la iniciativa, pero al mismo tiempo complejizando las negociaciones entre los actores.
En este sentido, Figueroa pone ciertas condiciones. “Antes de sentarse a conversar con las autoridades, tenemos que evaluar la disposición a entenderse de manera efectiva con las contrapartes. Después del juicio que hizo el Presidente Piñera respecto a las cúpulas sindicales (“muy distinto es creer que defender las cúpulas sindicales se defienden a los trabajadores”), con quienes el ministro Monckeberg se va a tener que sentar a negociar, por que si es así, cualquier diálogo que quieran construir no tendrá sentido”, advirtió.
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