Días atrás vimos mal acompañada a la presidenta de la república. Estaba junto a dirigentes del sindicato pro-empresa de Walmart en una actividad llamada “Mujerazo sindical”. También estaban presentes dirigentes de la CUT. El fin nos parece noble pero los organizadores del evento y sus protectores políticos están detrás de otros objetivos. Tratan de blanquear su imagen pro patronal con el apoyo de determinados agentes político-partidarios.
El sindicato interempresa de Líder (SIL) fue instalado por la empresa D&S en 2007 para impedir la libertad sindical y la negociación colectiva en la compañía. Esta historia fue contada por los sindicatos autónomos a quién aceptara escucharla. Primero fue la Comisión Especial de la Cámara de Diputados que presidió el hoy Senador Carlos Montes C. la que se enteró de las prácticas antisindicales de Líder y sus cómplices internos. Luego la Directora del Trabajo del periodo 2006-2010 estableció en un Dictamen que las prácticas de ese sindicato y de D&S (antecesora de Walmart) violentaban los derechos de sus trabajadores. Luego en 2009 la naciente Federación Nacional de Trabajadores de Walmart le escribió a la Presidenta Bachelet por la repentina inacción de la Dirección del Trabajo para implementar sus propios dichos y hacer justicia.
En abril de 2010 se hizo público que la ex plana mayor de la Dirección del Trabajo se dedicaría a la asesoría sindical y que su primer cliente sería el SIL. Durante cuatro años se esforzaron en esta tarea de “reformar” a dirigentes amarillos, sin mayor éxito parece porque esa organización disminuyó su representación y sólo pudo negociar convenios colectivos como fue siemp su conducta habitual, mientras nuestros afiliados negociaron Contratos Colectivos con dos años de duración y recién un Contrato con vigencia de siete meses.
Al instalarse el nuevo gobierno, varios de los asesores del SIL ocuparon posiciones de empleo público, que siendo de segundo nivel igual son útiles para ejercer determinadas influencias. Esta situación más la militancia partidaria del presidente del SIL y su alianza con sectores de la CUT han determinado que el sindicato amarillo aparezca destacándose en círculos oficiales.
Si a lo descrito unimos que esta Confederación rechazó la política de la CUT y del gobierno sobre multiruts e Ingreso Mínimo Legal, mientras el SIL decía que si a todo para salir en la foto, es evidente que la independencia y la autonomía están de nuestro lado y de la Federación Nacional del Trabajador de Walmart.
Esta Confederación respaldó el Programa de Gobierno de la Dra. Bachelet y mantenemos la esperanza de que las grandes reformas prometidas se cumplan. Lo mismo esperamos de los cambios en el terreno laboral que nos expresara en la oportunidad en que doscientos dirigentes de base de esta Confederación visitamos a la entonces candidata en su sede electoral.
No nos perdemos respecto de las tareas del movimiento sindical y los compromisos que con él asumieron las autoridades políticas durante la campaña. Por eso creemos que es puro artificio el papel que se autoasigna la dirección de la CUT en el canje que han dicho efectuaron al aceptar el Ingreso Mínimo Legal que se pactó a cambio de reformas laborales. Éstas fueron ofrecidas durante 2013 y en ello la cúpula de la CUT tuvo poco que ver.
Respecto del paro o marcha de este 4 de septiembre tenemos dudas fundadas. ¿Es para exigir que la CUT cumpla con sus responsabilidades o para requerir que las fuerzas de derecha dentro de la nueva mayoría permitan las reformas?
Entendemos que nuestra real tarea es conducir a los trabajadores a fortalecer su poder en los sectores donde estamos presentes. Buscaremos más y mejores negociaciones colectivas, más y mejores derechos laborales. Y en este camino no tendremos contemplación alguna con los dirigentes pro empresa y sus protectores políticos, que actúan por dinero o para cuidar sus miserables espacios. ¿Los padrinos políticos de dirigentes amarillos como los del SIL saben que están dañando gravemente la imagen de sus organizaciones partidarias?
En esta Confederación ya superamos los treinta mil afiliados y cumpliremos nuestra meta de constituirnos en la CENTRAL DEL RETAIL Y DEL COMERCIO, antes de los plazos que nos dimos. Haremos esta ruta teniendo como única responsabilidad el cumplir con las y los trabajadores que nos eligieron.
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