La investigación se orientó a visibilizar la violencia de género que se ejerce y difunde en redes sociales, particularmente aquella que enfrentan las mujeres y disidencias, pues dicha violencia contribuye a menoscabar el goce o ejercicio de sus derechos políticos, desincentivando la participación política de las mujeres en general.
Para esto se realizó un análisis interseccional con el objetivo de dar cuenta las diferentes formas de violencia que enfrentan mujeres y disidencias por su edad, origen étnico o racial, conocimientos, experiencia política, entre otros. En esa línea, los resultados tienen como objetivo problematizar la violencia política de género e incidir en el debate público para que se tomen acciones de prevención y erradicación de todas las formas de violencia contra las mujeres.
Resultados del estudio
El estudio clasificó las diferentes manifestaciones de violencia en dos grandes categorías: expresiones discriminatorias y desprestigio. A partir de la definición de cada una de sus dimensiones, se seleccionaron palabras claves cuyo significado coincidiera con la descripción. A partir de dicha clasificación se observó el tipo de interacción que se generaba en torno a candidatas feministas y/o disidencias sexuales.
Por una parte, se analizaron las menciones a 63 candidatas feministas, identificando que en 6 mil 246 se evidenciaba algún tipo de violencia explícita. De este total, 69% son expresiones discriminatorias y el 31% es desprestigio.
Como era esperable, las alusiones a roles y mandatos de género suben en este grupo y llegan al 8% de menciones. El principal insulto es loca o histérica, apelando a la falta de sumisión y obediencia que tienen éstas respecto a la construcción social de “la buena mujer”.
Del total de 18 candidatas que se auto identifican como disidencias sexuales de manera pública, se registraron mil 22 menciones violentas. En estas candidaturas se observaron también ofensas centradas en roles y mandatos de género que llegan al 10%, debido principalmente a insultos que tienen que ver con su orientación sexual o identidad de género.
Respecto a candidatas jóvenes y mayores, el menosprecio de capacidades es la expresión discriminatoria más prevalente (47%) y se centra en la falta de experiencia, trayectoria y conocimientos. En el caso de las candidatas que se desempeñan como académicas, se seleccionó a cinco que registraron 307 menciones violentas, aludiendo principalmente al menosprecio de capacidades y burlas que ponían en duda sus conocimientos disciplinarios.
En el caso de las mujeres indígenas y afrodescendientes las expresiones racistas son mayoritarias y aluden a prejuicios que estigmatizan a los pueblos indígenas y les asignan características negativas generalizadas, en particular al pueblo mapuche con acusaciones de terrorismo.
¿Quiénes enfrentan con violencia a las candidatas?
El resultado indica que, con independencia del partido político de la candidata, se trata generalmente de hombres (70%), identificados políticamente con la derecha en su mayoría.
Mariela Infante, socióloga de Corporación Humanas, advierte que “las amenazas, violencia y hostigamientos que recientemente ha denunciado la presidenta Elisa Loncon y otras constituyentes debe alertarnos para generar estrategias ‘hacia afuera’ de la Convención que visibilicen la violencia política de género y eviten su reproducción en redes sociales y otros espacios. En esta línea se enfoca la campaña ‘Dale unfollow a la violencia política de género’, de manera de dejar de normalizar y reproducir estas agresiones cuyo fin es deslegitimar a través de estereotipos de género a las mujeres, negando su pertenencia y competencia en la esfera política.
De la misma forma, es imprescindible establecer medidas “hacia adentro” de la Convención a través de la aprobación de un protocolo para prevenir y sancionar la violencia de género durante el funcionamiento y la suscripción del compromiso impulsado por la Articulación Territorial Feminista Elena Caffarena que invita a todas y todos los constituyentes a sumarse al desafío común de generar espacios libres de violencia de género, concluye la investigadora
“Internet es un espacio hostil para las niñas y mujeres y este estudio entrega evidencia que esto no es sólo una sensación, sino que es una realidad. La investigación devela, una vez más, que cuando levantamos la voz, sea en internet o en cualquier parte, las mujeres somos maltratadas. Desde Juntas en Acción estamos comprometidas con el fin de todo tipo de violencia de género, incluida la violencia política digital, por eso nos parece relevante, más aún en el marco del proceso constituyente, que se visibilice y se avance en educación y políticas públicas que permitan erradicar este tipo de violencia”, Claudia Núñez, coordinadora de Juntas en Acción.
En consecuencia, la identificación de diversas expresiones de violencia política de género contra las candidatas seleccionadas en el estudio, representa un llamado de atención para prevenir que otras formas de violencia sigan afectándolas en tanto constituyentes electas.
Link al estudio
Fuente: Radio Universidad de Chile